Enclavada entre las elevaciones de la Penya Migjorn y del histórico Puerto de la Carrasqueta, se revela la encantadora Jijona, una sugerente villa de la provincia de Alicante que resplandece con el orgullo de ser reconocida como la cuna del turrón. Este pintoresco pueblo, de nombre Xixona en el valenciano local, presume de su legado musulmán y de su rica herencia gastronómica.
Rodeado por un paisaje que a primera vista parece árido, Jijona sorprende con su riqueza natural, albergando hasta ciento cuarenta fuentes que brotan en su término municipal, el quinto más extenso de la provincia. Las laderas que la rodean, antes cubiertas por el florecer de los almendros cual manto nevado, narran la importancia de la almendra marcona, ingrediente clave en la elaboración del turrón. El Castillo de la Torre Grossa, imponente y lleno de historia, se alza como testigo del pasado y presente de esta fascinante localidad.
Acompáñame en este viaje por Jijona, un lugar donde cada rincón te habla de su pasado musulmán, sus tradiciones culinarias y su sorprendente naturaleza. Explora conmigo este encantador pueblo alicantino, donde el legado de la almendra y el turrón se entrelaza con la historia de sus calles y monumentos. ¡Ven a descubrir qué ver y hacer en Jijona / Xixona!
Qué ver y hacer en Jijona / Xixona
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1. Ayuntamiento y Avenida de la Constitución
Te recomiendo comenzar tu visita por la encantadora Avinguda de la Constitució, centro neurálgico del pueblo, conocido como «La Plaça» por los locales. Aquí encontrarás el Ayuntamiento de Jijona, un edificio neoclásico del siglo XVIII. La avenida está repleta de tiendas, restaurantes y bares, y es un buen lugar para pasear y disfrutar del ambiente local.
Si paseas por este atractivo bulevar en temporada de turrón, te recomiendo prestar atención a tu sentido del olfato: seguramente captarás una atmósfera impregnada del dulce aroma de la almendra tostada. Este deliciosa fragancia emana de una de las fábricas que todavía se ubica en el centro urbano, manteniendo viva la tradición artesanal. Hablaremos de ella más adelante.
Entre los edificios destacados de esta arteria principal de Jijona se encuentran la Casa Monerris Planelles, la Agrupación Cultural Casino y la sociedad El Trabajo.
Si llegas a Jijona a la hora del aperitivo, no dejes de pasar por el «Mercado» de abastos y la cervecería La Solana. Para comer, te recomendamos el restaurante-bocateria l’Entrepà, que cuenta con un menú del día con platos típicos de la localidad, así como algunas tapas con turrón que han sido galardonadas a lo largo de varias convocatorias de la ruta de la tapa de Xixona.
2. Iglesia Nuestra Señora de la Asunción
Es hora de comenzar la visita al centro histórico de Xixona, y lo hacemos poniendo rumbo a la Iglesia Arciprestal de Nuestra Señora de la Asunción, la iglesia principal de la población. Es un edificio gótico del siglo XIV que alberga una imagen de la Virgen de la Asunción, patrona de la ciudad. El interior de la iglesia está decorado con un retablo barroco del siglo XVIII y con una colección de pinturas religiosas.
3. Esglèsia Vella
Comenzamos el ascenso a través del casco antiguo de la población, caracterizado por callejones estrechos y empinados, legado del origen musulmán de la villa. La Esglèsia Vella es una iglesia románica del siglo XII que se encuentra en el casco antiguo de Jijona y de la que solo se conserva la portada. Es uno de los monumentos más antiguos de la ciudad y tiene mucho encanto a pesar de lo poco que queda de ella.
4. Casco Antiguo – free tour
El casco antiguo de Jijona es un laberinto de calles estrechas y empinadas que albergan un buen número de edificios históricos, algunos de ellos señoriales. Es un lugar encantador para pasear y perderse. Entre los edificios históricos más destacados se encuentran el Convento de los Franciscanos, la Torre Blai y el Forn del Raval. Nosotros hicimos el free tour llamado «de los musulmanes al turrón» con el guía Josep Miquel, y sin duda lo recomendamos para conocer Jijona más a fondo.
5. Castillo de La Torre Grossa
El Castillo de Jijona o Castell de la Torre Grossa es una fortaleza medieval que se encuentra en lo alto de la colina que domina la ciudad. Fue construido en el siglo XII y ha sido escenario de numerosas batallas a lo largo de la historia. El castillo fue restaurado en 2020 y en la actualidad solo se puede visitar solicitando el acceso con antelación en el Ayuntamiento. Si tienes ocasión, merece la pena adentrarse en esta fortaleza, conocer su historia y admirar sus fantásticas vistas, que alcanzan hasta el Castillo de Santa Bárbara de Alicante en días despejados.
¿Sabías que Xixona se ubicó en la frontera entre los reinos de Valencia y Castilla en el siglo XIII? Esto hizo que Jijona pasara a ser considerada una de las villas más importantes en la frontera meridional, dada su posición estratégica.
6. Torre Blai
Cerca del castillo de Jijona, la Torre Blai es una gran casa de aspecto señorial cuyo historia se remonta al siglo XIII, siendo originalmente un molino de viento. Este edificio es importante para Jijona ya que aquí se produjo el primero de los milagros que se atribuyen a la imagen de San Sebastián, que había sido escondida en el interior de las paredes de la torre hasta que unos misteriosos golpes hicieron que fuera descubierta.
7. Forn del Raval de la Peñita
El Forn del Raval de la Peñita es un horno de leña tradicional, con raíces moriscas y diseño medieval. Documentado ya en el siglo XVI, su origen podría remontarse al XV. Considerado uno de los más antiguos de la Comunidad Valenciana, es una auténtica maravilla patrimonial y gastronómica. Este horno es famoso por sus deliciosas pastas típicas de Jijona. Entre ellas, las tonyetes, pequeños dulces crujientes elaborados con almendra, harina y canela, y las doblaes, especie de «toñas» (bollos) preparadas especialmente para Todos los Santos. Además, ofrece magdalenas, tortadas y una variedad de postres y dulces tradicionales. Su horario es de Martes a Sábados de 9.00 a 14.00 horas.
Y si eres fan de los dulces y la panadería artesanal, también te recomendamos pasar por Artesanía Cecilia, donde además de los dulces podrás degustar sus espectaculares empanadillas saladas de diferentes rellenos.
8. Ermita del Raval
La Ermita del Raval de Jijona es una construcción histórica encajada entre edificaciones vecinas. Fabricada con muros de mampostería y un techo a dos aguas, la ermita alberga una nave de modestas dimensiones. Destaca un retablo con la imagen de San Sebastián. Esta ermita está envuelta en una leyenda local: se dice que en 1600, cuando Jijona enfrentaba la amenaza de la peste, en esta casa se encontraba una imagen de San Sebastián. Según cuenta la tradición, un 24 de julio, mientras la propietaria limpiaba, notó que la imagen derramaba lágrimas. La creencia popular sostiene que este milagroso evento salvó al pueblo de la peste. En agradecimiento, los habitantes de Jijona comenzaron la tradición de sacar la imagen en procesión.
9. Convento de los Franciscanos
Aunque su construcción se inició en 1595, las obras se prolongaron durante los siglos XVII y XVIII. Este conjunto monástico incluía la Capilla de la Venerable Orden Tercera, la Iglesia y el Convento, este último demolido en 1974.
La capilla, construida entre 1758 y 1762 bajo influencias neoclásicas, destaca en la provincia de Alicante por ser un ejemplo único de capilla independiente adosada a la iglesia principal. Actualmente, alberga el Archivo Histórico Municipal, que posee documentos desde 1350.
El templo principal se caracteriza por una nave única con una decoración barroca de motivos vegetales y angelotes. Hoy, conocido como El Teatret, se utiliza como espacio para exposiciones, conciertos y conferencias.
10. Fábrica de Primitivo Rovira e Hijos
De vuelta a la Avenida de la Constitución, es hora de saborear un dulce premio. Primitivo Rovira e Hijos es una fábrica artesanal de turrones y dulces ubicada en la céntrica avenida de Jijona. Es una de las turroneras más antiguas de la ciudad: su origen se remonta al año 1850. En la actualidad, ya con la sexta generación de la familia, siguen elaborando el turrón de forma artesanal, con procesos y maquinaria que apenas han cambiado desde sus inicios; y con materia prima local. La fábrica ofrece visitas guiadas gratuitas para conocer el proceso de elaboración del turrón.
11. Feria de Navidad de Jijona
La mágica Feria de Navidad de Jijona se celebra cada año en el corazón de la ciudad conocida por ser la cuna del turrón. Del 5 al 10 de diciembre, este evento festivo transforma la céntrica Avenida de la Constitución en un paraíso navideño. Aquí, bajo las luces festivas y el ambiente jubiloso, los maestros turroneros despliegan su habilidad artesanal, ofreciendo desde el clásico turrón de Jijona y Alicante hasta innovadoras variantes como el turrón de chocolate y de diferentes sabores.
La feria va más allá de ser un mero escaparate de turrones. Se convierte en un epicentro cultural, albergando una serie de conciertos, exposiciones y actividades que enriquecen la experiencia. Es el lugar ideal para sumergirse en la alegría navideña, degustando lo mejor de la gastronomía de Jijona, acompañado de otros productos típicos de la temporada como dulces selectos, licores artesanales y exquisita artesanía.
12. Museo del Turrón
El Museo del Turrón de Jijona es un museo dedicado a la historia y la elaboración del turrón. Está ubicado en el polígono industrial Ciudad del Turrón, a unos 2 kilómetros del centro de la ciudad (antes de entrar al pueblo si llegas desde Alicante ciudad).
La visita al museo comienza con un vídeo que explica la historia del turrón y su importancia en la economía de Jijona. A continuación, los visitantes pueden recorrer las diferentes salas del museo, donde se exponen objetos relacionados con la elaboración del turrón, como maquinaria antigua, utensilios de cocina, y fotografías y documentos históricos.
También hay zonas sala dedicadas a la historia de la empresas El Lobo y 1880, dos de los más destacados fabricantes de turrón de Jijona. En esta sala, los visitantes pueden aprender sobre los orígenes de las empresas, sus productos y su expansión internacional.
Finalmente, la visita termina en la tienda del museo, donde los visitantes pueden comprar diferentes tipos de turrón, así como otros productos típicos de Jijona.
En temporada alta (16 julio – 31 diciembre) el museo está abierto todos los días, también festivos, de 10:00 a 13:00 y de 15:30 a 18:30.
La entrada al museo tiene un precio de 3 euros para adultos en temporada alta y de 1.5 euros en temporada baja. Hay tarifas reducidas para niños, jubilados y grupos de más de 10 personas. Si tienes pensado visitarlo, te recomendamos ir a primera hora ya que suele haber bastante gente.
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Enhorabuena por el artículo, muy interesante y ameno. Como entusiasta que soy del buen turrón, ojalá algún día pueda visitar Xixona, ese nombre asociado al turrón blando que oyes desde niño y que años más tarde descubrí que era el nombre de un pueblo
Muchas gracias, Marcos, y ojalá que pronto puedas ver cumplido ese «dulce» sueño ;)
Gracias Fernando, precisamente ayer estuvimos en Jijona. Ahora veo que lo anunciabas en Telegram y me viene muy bien para recordar o ratificar mis notas para mi álbum particular.
Gracias a ti, Antonio, me alegra que te guste, un saludo y Feliz Año Nuevo!