8 Calas escondidas de Alicante para los más aventureros

La costa de Alicante esconde verdaderos tesoros naturales a la espera de ser descubiertos. Entre sus rincones más recónditos, se encuentran una serie de calas poco conocidas que permiten al viajero perderse en la belleza del Mediterráneo lejos de las aglomeraciones.

Desde calas de arenas doradas y aguas cristalinas, hasta enclaves rocosos que invitan a explorar sus rincones más escondidos, esta selección de las mejores calas secretas de Alicante te desvelará algunos de los parajes costeros más cautivadores de nuestra región costera.

¡Quédate hasta el final y toma nota de nuestras recomendaciones!

8 Calas Escondidas de Alicante

1. Cala del Racó del Corb (Altea-Calp)

La belleza salvaje de este lugar lo convierte en un enclave único en el litoral alicantino. Una zona de geología espectacular que ha dado lugar a rincones tan espectaculares como el Cañón del Mascarat o esta minúscula Cala del Racó del Corb, situada al abrigo de las enormes paredes verticales del Morro de Toix. Esta es una playa de difícil acceso cuyas aguas forman parte del Parque Natural de la Serra Gelada.

2. Cala del Ti Ximo (Benidorm)

En el extremo más natural de Benidorm, en los límites del Parque Natural de la Serra Gelada, encontramos dos pequeñas playitas de gran belleza, con fina arena y lecho rocoso, ideales para la práctica del snorkel: la Almadrava y la Cala del Ti Ximo. Tendrás que llegar hasta ellas caminando, lo que casi garantiza que las vas a encontrar poco concurridas para estar hablando de esta turística población.

3. Cala dels Testos (Benitatxell)

Aunque hace años que esta minúscula cala de Benitatxell dejó de ser «secreta», su acceso muy difícil por tierra y su belleza única hace que siga siendo una buena alternativa para quienes buscan calas de Alicante poco concurridas.

4. Cala Ferris (Torrevieja)

La preciosa Cala Ferris, de aguas cristalinas y con esas palmeras que te hacen soñar con el Caribe, es uno de los pocos reductos «vírgenes» de la costa de Torrevieja. Un lugar fantástico para practicar snorkel y sumergirte en su pradera de posidonia, pero también para pasear relajadamente a orillas del mar.

Lo cierto es que Torrevieja posee una amplia variedad de playas: desde las más amplias de fina arena, como la Playa de la Mata, hasta las pequeñas calitas de roca, como la del Moro o La Higuera.

5. Cala de la Barra Grande (Altea)

La Cala de la Barra grande se sitúa en la zona norte del término municipal de Altea, dentro del ámbito marítimo del Parque Natural de la Serra Gelada.

Protegida por la Punta del Mascarat, esta diminuta playa de bolos es de tradición naturista y mide apenas 50 metros de ancho. Su acceso es por un sendero de tierra con bastante pendiente.

6. Cala Cap Blanc (Moraira)

Entre Calpe y Moraira encontrarás este acceso al mar escondido entre urbanizaciones que te conduce, a través de unas escaleras, a un rinconcito apartado y tranquilo. Una piscina natural de aguas cristalinas que cuenta con su propia escalera y que resulta ideal para practicar esnórquel o simplemente disfrutar de un relajante baño.

7. Cala Llebeig (Moraira-Benitatxell)

La única forma de llegar a Cala Llebeig por tierra es realizando una ruta de senderismo. Gracias a esta «dificultad», esta calita escondida se ha mantenido en un estado prácticamente inalterado y con sus pintorescas casitas de pescadores como única intervención humana.

8. Cala En Caló (Jávea)

En Caló es una minúscula y preciosa calita de Jávea, escondida al pie de impresionantes acantilados y no muy lejos de la popular Granadella. Conocida por algunos medios como la «cala secreta» de Jávea, llegar por mar es la única forma de acceder a esta playa de belleza exótica que recuerda a países del sudeste asiático.

En este artículo sobre Cala En Caló te cuento cómo llegar y te recomiendo la excursión en kayak que debes reservar para conocer esta maravilla natural de Xàbia.